Un reciente informe reveló los modelos con más robos en Chile y evidenció diferencias de hasta tres veces en el valor de las pólizas para un mismo vehículo. Expertos de ACOSEG entregan recomendaciones clave para cotizar con criterio y elegir la protección adecuada.
Si compraste un auto hace poco o estás pensando en renovar tu póliza, no te quedes solo con el valor mensual. Un reciente informe de la Asociación de Aseguradoras de Chile reveló que entre enero y julio de este año se registraron 8.143 robos de autos asegurados en el país, con 1.224 casos solo en julio.
Lo más preocupante es que un 33% de estos robos se concentra en apenas diez modelos, entre los que destacan Toyota Hilux, Toyota RAV4, Mitsubishi L200, Ford Territory, Chevrolet Groove, Suzuki Baleno, Mazda CX-5, Subaru XV, Kia Rio y Chery Tiggo.
Este escenario ha tenido un efecto directo en los precios de los seguros. De acuerdo con la Asociación Gremial de Corredores de Seguros de Chile (ACOSEG), en los últimos meses se han detectado diferencias de hasta tres veces en el valor de las pólizas para un mismo modelo.
“Cuando ciertos autos tienen alta siniestralidad, ya sea por robos o accidentes, eso impacta directamente en el valor de las primas. A mayor riesgo, mayor costo del seguro. El mercado ajusta condiciones, subiendo precios o aplicando deducibles más altos”, explica Ernesto Saavedra, socio de ACOSEG.
Pero, más allá del precio, hay otros factores igual o más importantes que mirar al momento de elegir tu seguro. Aquí te contamos los principales.
1. Fíjate en las coberturas
No todos los seguros son iguales, aunque lo parezcan. Dos pólizas con valores similares pueden ofrecer protecciones muy diferentes. Saavedra lo resume así: “Las diferencias de precio muchas veces tienen que ver con lo que cubren o dejan de cubrir. No es lo mismo una prima baja con deducibles altos, que una con mayor cobertura y reposición a nuevo”.
Antes de decidir, revisa si tu póliza incluye reposición a nuevo (en caso de pérdida total), qué tipo de daños cubre y cuáles son sus exclusiones.
2. Compara entre aseguradoras
Las variaciones de precios entre compañías pueden ser grandes, incluso para un mismo auto. Por eso, es importante cotizar en más de una aseguradora y leer con calma las condiciones. Una diferencia aparente en el costo mensual puede deberse a límites de cobertura, deducibles más altos o menos beneficios incluidos.
3. Revisa la red de talleres y la asistencia en ruta
Un detalle que muchos pasan por alto es la red de talleres y los servicios de asistencia. Si tu aseguradora trabaja con talleres certificados y ofrece servicios como grúa, cambio de neumáticos o rescate en carretera, eso puede ahorrarte mucho tiempo y dinero ante un imprevisto.
4. No subestimes la responsabilidad civil
Este punto es clave. Si provocas un accidente y hay daños a terceros, la responsabilidad civil cubre esos gastos. Es importante asegurarte de que el monto máximo de cobertura sea suficiente para evitar costos adicionales en caso de un siniestro grave.
5. Busca asesoría profesional
“Un buen seguro es una inversión en tranquilidad. Cotizar con tiempo, revisar condiciones y comparar entre aseguradoras puede marcar la diferencia entre estar protegido o enfrentar gastos imprevistos de alto costo. Por eso siempre es recomendable contar con un corredor de seguros que oriente al cliente según sus necesidades”, agrega Saavedra.
En tiempos donde los robos y accidentes van al alza, contar con la protección adecuada no es un lujo, sino una necesidad. Cotizar bien, entender qué cubre cada plan y elegir con información puede marcar la diferencia entre manejar tranquilo o arrepentirse después.